viernes, 16 de septiembre de 2011

Boicot en el Bundestag


A finales de este mes vendrá el Papa a su querida Alemania e intentará hablar en el Bundestag (el parlamento federal alemán). Digo intentará porque ya se ha anunciado que una gran parte del mismo boicoteará el acto y no asistirá. Entre ellos está el partido socialista (SPD) y los verdes. Una de las razones para el boicot es que el parlamento no  se puede utilizar como tribuna de ideas religiosas. Como el Papa es la cabeza de la Iglesia católica pues no puede dejar de ser doctrina católica lo que salga por su boca. La segunda razón argüida es la continua lesión de los derechos humanos por parte de la Iglesia católica al no aceptar los matrimonios homosexuales, la igualdad de la mujer en la Iglesia (sacerdocio femenino) y la presunta cooperación en los casos de pederastia que han salido a la luz esto últimos años y del que hacen responsable directo al Papa. No voy a intentar defender la actuación de la Iglesia ni a juzgar si la cabeza de la institución debería de ser cortada por los actos de algunos de sus miembros. Mejor se podría haber hecho y errores cometen todas las instituciones gobernadas por hombres. Pero me parece una exageración el que intenten sentar a BXVI en el banquillo de los acusados, como algunos rabiosos anticlericales han anunciado. ¿Deberíamos hacer lo mismo con Zapatero o Rajoy por su responsabilidad en los casos de corrupción de los políticos de sus partidos? ¿Tendríamos que procesar al  ministro de educación si se pilla a un profesor pederastra? El hecho es que este Papa ha actuado con prontitud y ha encauzado el problema de manera contundente. Pero volviendo a Alemania, desde 1951 hasta hoy han sido invitados a hablar en el Bundestag personalidades de distinta procedencia, cultura e ideas políticas. De manera habitual y con ocasión de algún aniversario del holocausto son invitadas personas que sufrieron en el mismo, como Jorge Semprún, y que han destacado en su vida pública así como una lista interminable de políticos israelíes. Es habitual también el invitar a presidentes de gobierno de otros países o de organismos políticos internacionales. La lista completa puede encontrarse aquí.

No estoy de acuerdo con los motivos para el boicot de los políticos alemanes por las siguientes razones:


Primero, porque el Papa es también un jefe de estado. Segundo, porque es una personalidad histórica y cultural tan respetable como por ejemplo el nobel Elie Wiesel historiador americano y víctima del holocausto invitado en el año 2000. Tercero, que el cabeza de la Iglesia católica pronuncie un discurso desde cualquier tribuna no significa que esté imponiendo o haciendo propaganda de ninguna ideología o religión pues lo mismo hace aquí y allá gente tan dispar como el Dalai Lama aunque este no haya sido todavía invitado al Bundestag. Y cuarto, porque como filósofo, teólogo y humanista, BXVI ha aportado mucho y no sólo a la cultura alemana. Una pena que sus propios compatriotas no estén orgullosos de recibir a su Papa alemán. Pero la ideología puede llegar a dirigir nuestra voluntad a veces de manera más cegadora y rabiosa que los propios sentimientos.

Así que lo único que observo es el ataque de siempre por los de siempre a una doctrina con la que no comulgan. Una doctrina que sostiene que el camino que ha elegido esta sociedad llevará al hombre directamente al abismo. Y esto no nos gusta que nos lo recuerde nadie. Pero no nos equivoquemos, hoy la Iglesia no impone nada a nadie, ni existe la inquisición ni hay obligación de pertenecer a ella. De hecho en Alemania sólo hay un 30% de la población se define católica, entonces ¿por qué tanto empeño en seguir dándole caña al mono? Pues por lo de siempre y no deberíamos asombrarnos porque ya lo dijo Alguien hace XX siglos: los discípulos no pueden ser más que el maestro.

3 comentarios:

  1. La Iglesia y los Papas han sido criticados frecuentemente. Ya que "rezamos pocos, y los que rezamos, rezamos poco"' pues eso: a rezar.

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  2. Toda la razón... a rezar y a aguantar....

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  3. No pensaba que la estupidez progre había calado tanto entre la izquierda alemana...Si ya empezaba a sospechar de esto con la crisis de los pepinos en Alemania...Por cierto, te recomiendo que veas, por Internet, el debate del pasado domingo del programa de Intereconomía TV "Lágrimas en la lluvia" sobre los límites morales de la ciencia. Un saludo.

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